Un vigilante de seguridad es un profesional que se encarga de la vigilancia y protección de bienes, establecimientos, lugares y eventos, tanto privados como públicos, así como de las personas que puedan encontrarse en los mismos. Para ejercer esta labor, el vigilante de seguridad debe contar con una habilitación por parte del Ministerio del Interior, que acredita su formación especializada y sus conocimientos en materia de seguridad.
Pero, ¿cuáles son exactamente las funciones de un vigilante de seguridad? Según el Reglamento de Seguridad Privada, estas son las principales tareas que debe realizar este profesional:
• Efectuar controles de identidad en el acceso o en el interior de determinadas instalaciones, sin retener la documentación personal, pero sí impedir el acceso o el abandono si se niegan a exhibirla o a permitir el control de objetos personales, paquetería, mercancías o vehículos.
• Evitar la comisión de actos delictivos o infracciones administrativas en relación con el objeto de su protección, realizando las comprobaciones necesarias para prevenirlos o impedir su consumación, debiendo oponerse a los mismos e intervenir cuando presencien la comisión de algún tipo de infracción o sea precisa su ayuda por razones humanitarias o de urgencia.
• Detener y poner a disposición de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad competentes a los delincuentes y los instrumentos, efectos y pruebas de los delitos, así como denunciar a quienes cometan infracciones administrativas. No podrán interrogar a los detenidos, solo anotar sus datos personales para comunicarlos a las autoridades.
• Proteger el almacenamiento, recuento, clasificación, transporte y dispensado de dinero, obras de arte y antigüedades, valores y otros objetos valiosos, así como el manipulado de efectivo y demás procesos inherentes a la ejecución de estos servicios.
• Llevar a cabo servicios de respuesta a las alarmas en relación con el funcionamiento de centrales receptoras de alarmas. Estos servicios pueden incluir la verificación personal y la actuación ante las señales de alarma que se produzcan.
• Colaborar con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad siempre que estos lo requieran, siguiendo sus instrucciones en relación con las personas y bienes que estén bajo su protección. Por ejemplo, en casos de suspensión de espectáculos, desalojo o cierre provisional de locales, o cualquier situación que afecte a la seguridad ciudadana.
Como se puede apreciar, las funciones de un vigilante de seguridad son muy variadas y requieren una gran responsabilidad y profesionalidad. Por eso, es importante contar con una empresa de seguridad que ofrezca un servicio integral y de calidad.
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